La industria textil es la segunda que más contamina nuestro planeta, solo por detrás de la petrolera. Entre los impactos ambientales que genera este tipo de industria se encuentran el vertido de aguas residuales con alta carga de sustancias químicas o la emisión de CO2 a la atmósfera como consecuencia de la energía utilizada en la fabricación.
Además, otro problema importante es el consumo de agua. Por ejemplo, para la fabricación de un pantalón vaquero se emplean entre 2.130 y 3.078 litros de agua. Esto es debido a que el algodón, cultivo que se utiliza para su manufactura, es intensivo en el consumo de agua.